Cuando más fuerte gritas menos se te escucha.

Hace unos pocos años una joven me pidió poder contactar con su guía a través de una canalización. El motivo por el cual deseaba mantener ese contacto era debido a una serie de circunstancias que estaba viviendo en su hogar y que la angustiaban enormemente.
Os voy a contar esta historia porque en bastantes ocasiones me encuentro con personas que cuando obtienen la respuesta a alguna duda como por ejemplo saber que les está obstaculizando con el tema de la fluidez económica, no saben cómo iniciar un nuevo proceso para generar que ese bloqueo desaparezca.

El ejemplo que os voy a exponer es para que os deis cuenta de que no hay que obsesionarse con saber cómo hacer las cosas porque nuestra Alma y nuestro equipo Angélico es tan eficiente que si nosotros no nos direccionamos hacia donde debemos, ellos ponen a nuestra disposición todas sus capacidades de organización para que vivamos de una forma humana la experiencia que nos enseñará a cambiar ese chip.

La principal angustia de esta joven era la relación que mantenía con los miembros más cercanos de su familia, sus hermanos, su padre, pero especialmente con su madre.
Sentía que no era escuchada ni comprendida . Comentaba que cuando intentaba mantener una conversación con algunos de ellos , siempre acababan con alguna bronca . Si por ejemplo se dirigía a alguno de sus hermanos,aunque fuera en principio de buenas maneras , éstos automáticamente y como si de una especie de resorte se tratará, inmediatamente se ponían en guardia y la respuestas eran en un ...Qué estás buscando ya!!!.

Este tipo de respuestas acababa inmediatamente con su buena predisposición y automáticamente se generaba un conflicto en mayor o menor grado. Como en todos los hogares ante esas situaciones acaba interviniendo uno de los progenitores con lo cual si una de las personas ya ha perdido “los papeles”( en este caso nuestra joven) pierde entonces “sus razones”, con el consecuente resultado generando con ello una espiral de conductas y conceptos en dónde hiciera lo que hiciera nuestra chica ya tenía perdidas sus mejores intenciones.

Pese a todo ello Patricia que así llamaremos a la protagonista de esta historia,intentaba una y otra vez hacerse oír , sobre todo con su madre ,La buena mujer le explicaba que debía tener más paciencia y no descontrolarse a la primera de cambio, pero era entonces cuando Patricia nuevamente “saltaba” diciendo que era ella la que daba los paso para acercarse, que era ella la que ponía la intención, que era ella...
En definitiva nuestra joven no quería realmente ser escuchada , si no reconocida, que es distinto porque no “escuchaba” lo que su madre le aconsejaba , al igual que no lo hacían los demás miembros de su familia con ella. Su ego humano, sólo buscaba que le dieran la razón, su ego humano sólo buscaba que le reconocieran sus esfuerzos por acercarse a su familia...Pero su Alma le estaba diciendo a través de todas esas vivencias que tenía una lección que aprender que era saber escuchar con paciencia (paz y ciencia).

Aquí podemos observa nuevamente cómo las energías sutiles del Cosmos actúan para que todos los seres humanos obtengamos aquello que hemos venido a adquirir.

En este punto de la historia es cuando Patricia acude a mi consulta y mantiene una entrevista con su guía la cual se presentó como una energía femenina. Ese ser lumínico le dio varios matices a nuestra joven intentando en todo momento que ella pudiera percibir todo lo que sucedía a su alrededor desde diferentes perspectiva , pero finalmente le dijo una frase que fue la clave principal para que Patricia pasado un tiempo pudiera entender lo que su alma estaba intentando captar. Le dijo...”Cuando más fuerte gritas menos se te escucha”.
Este mensaje a priori sólo hizo un efecto de primera toma de conciencia en la muchacha pero como antes os comentaba , a ella le quedó la sensación de ...¿y ahora cómo lo hago?. ¿ Empiezo a hablar vajito? , ¿ Me callo?.
Evidentemente , Patricia es un chica decidida y probó todo lo que se le ocurrió a partir de ese encuentro con su guía, pero nada de lo que puso en práctica le funcionó, con lo cual no mucho tiempo después, acabó marchándose de casa.
Fueron muchas las anécdotas que sucedieron en su vida y las experiencias que fue adquiriendo por la toma de esa decisión , ya que estuvo compartiendo la vivienda con otras personas y se encontró con muchos obstáculos que tuvo que solucionar, hasta que un buen día....

Patricia como muchas personas ha sido afectada por lo que se conoce como crisis, con lo cual tuvo que volver a instalarse nuevamente en casa de sus padres.
Al poco tiempo encuentra un trabajo de teleoperadora, concretamente de atención al cliente.
¿Genial, no?...En ese trabajo Patricia se pasa ocho horas diarias “escuchando” las quejas o las dudas de todas aquellas personas que llaman.

En este tipo de trabajo Patricia ha encontrado personas que se han dirigido a ella en principio con enojo o prepotencia , algunos de ellos con el tono de voz elevado e incluso ha habido gente que se ha desahogado profiriendo algún que otro insulto.

En una de esas ocasiones que recibe una llamada,hubo una mujer que la llamó para consultarle un tema en concreto pero esa buena mujer hablaba muy bajito pero al mismo tiempo muy dulcemente y Patricia tuvo que subir el volumen de su receptor para poder escucharla mejor.... En ese momento le vino a la memoria las palabras claves que un día su guía le dio y comprendió por fin qué predisposición tenía ella cuando una persona quería que la escucharan por una u otra cuestión .Se dio cuenta de que cuando mas dulcemente y más bajito le hablaban , más atención ponía ella.

El resultado de todo ello es el cambio que se ha generado en las relaciones con su familia y que como ha entendido la lección que le estaban dando, ahora puede pasar página y próximamente acaba su contrato de trabajo y ya tiene otro en puertas completamente distinto.

A Ambas nos gusta pensar que ese día no llamó una mujer cualquiera , si no que fue su guía la que dulcemente se puso al teléfono para que ella comprendiera lo que estaba haciendo en ese lugar. Es decir aprender a escuchar.

Maribel Bermúdez. Crecimiento Activo.